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Selección de textos y documentos:

Doralicia Carmona Dávila

© Derechos Reservados
ISBN 970-95193

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1821 Segundo informe de O’Donojú al ministerio de Guerra sobre el estado de Nueva España.

Veracruz, agosto 13 de de 1821.

 

Excelentísimo señor.

Por mis cartas de 31 del pasado y 5 del corriente di a Su Majestad por conducto de vuestra excelencia noticia del estado de estas provincias, en la desesperada situación de verme reducido a los estrechos límites de esta plaza, recibiendo a cada hora el parte de haber sido acometido del vómito negro uno de los jefes y oficiales que me acompañaron, el de la muerte de otro de los mismos, rodeado de enfermos dentro de mi casa, agotada la tesorería, falto de víveres, sin fuerza alguna de que disponer, abatidos los ánimos, todo el reino en insurrección, sin partes exactos del interior, el espíritu público declarado por la independencia, criollos y europeos animados de un odio irreconciliable, la capital en poder de una autoridad intrusa sostenida por tropas insubordinadas que acaban de deponer al legítimo virrey, ignorando si éstas, aun cuando yo pudiese penetrar a México, me entregarían el mando, paralizado el comercio, interceptados los caminos, abandonados los campos, perdida la industria, todo en desorden, hasta las ideas dislocadas, sin poder formar juicio sobre el carácter de los partidos, y en una situación singular en que no me quedaba más arbitrio que entrar en negociaciones, sin que ni de éstas pudiese prometerme regulares resultados por que carecía de todo apoyo, me aventuré a publicar la proclama del 3, que incluí a vuestra excelencia en carta del 5; no fue mal recibida, mi lenguaje, desconocido en este país en boca de sus gobernantes, ideas de conciliación, de amor y de orden, promesas de conseguir, sin estrépito y sin desgracias lo que no podían esperar de otra manera que oyéndome y siendo dóciles, les llamó la atención y preparó los ánimos. El primer resultado favorable fue proponerme el comandante de los sitiadores un armisticio, movido de los sentimientos que expresé en mi proclama, que él mismo decía había leído con satisfacción; en efecto, después de varias contestaciones comprendidas en los números desde el 1 hasta el 4; convenimos en lo que resulta del núm. 2 y las puertas de la plaza se abrieron hoy, quedando franca la correspondencia con el campo y pudiéndose transitar con libertad.

Ya el día 6 había dirigido al coronel Iturbide, primer jefe del Ejército Imperial, un oficio al tenor del número 5 y una carta conforme al número 6, siendo los conductores [el] teniente coronel D. Manuel Guall y [el] capitán D. Pedro Pablo Vélez, el primero nombrado diputado en Cortes, y el segundo de la diputación provincial de México, quienes accidentalmente se hallaban aquí y se prestaron a hacer este servicio, por la influencia que tienen en el país, por su representación y por sus relaciones con algunos jefes de la independencia; ayer recibí un oficio que me dirigen desde Orizaba y es a la letra conforme al número 7.

Este es el estado de Nueva España, y los primeros pasos que he dado en desempeño de los destinos que el rey se dignó confiarme; puede vuestra excelencia asegurar a Su Majestad que trabajaré siempre por ser digno de la confianza con que me honró, trabajando cuanto esté a mis alcances en bien de la humanidad y mayores ventajas de mi patria, conciliables con la independencia de este reino, que ya es indefectible e irremediable. Si bajo este concepto Su Majestad me considera útil, convendría se me diesen instrucciones arregladas al nuevo estado de cosas, o se me mandase retirar. Réstame decir a vuestra excelencia que nada hay que esperar de las tropas de México, ni de su jefe, Novella, porque aun cuando hiciesen la resolución de sacrificarse por la causa de los europeos, siempre sin éxito por su poco número, por su posición, por su falta de recursos, y porque sus pérdidas no pueden reemplazarse, jamás pelearán por sostener la Constitución que desaman, habiendo dado pruebas nada equívocas de su ninguna adhesión a este sistema.

Dios guarde a vuestra excelencia muchos años. Veracruz, 13 de agosto de 1821.

Excelentísimo señor. Juan O’Donojú.

Excelentísimo señor ministro de la Guerra

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Juan Ortiz Escamilla (Comp.) [Con la colaboración de David Carbajal López y Paulo César López Romero] Veracruz. La guerra por la Independencia de México 1821-1825. Antología de documentos. Comisión Estatal del Bicentenario de la Independencia y del Centenario de la Revolución Mexicana.