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Autora: Doralicia Carmona Dávila.

© Derechos Reservados
ISBN 970-95193

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Llega a la Nueva España fray Pedro de Gante, iniciará la conquista espiritual de México.

Enero 19 de 1523 (¿?)

 

Desde el inicio de la conquista, los españoles tuvieron conciencia de la necesidad de sustituir las creencias religiosas que legitimaban el sistema de dominación indígena por los nuevos dogmas católicos que sustentaran el dominio español sobre los pueblos indígenas. Cortés mismo atestiguó que despojados los indígenas de sus antiguos dioses aceptaban dócilmente la sumisión a los nuevos amos. A la conquista por las armas tenía que seguir una conquista espiritual mediante un gran esfuerzo de evangelización que también convenía a la Iglesia para aumentar su poder terrenal en el nuevo continente. La conversión indígena fue resultado de la derrota y la violencia fue su instrumento. Así nacerá el México católico, apostólico y romano.

Que en la Nueva España fueran establecidas las órdenes religiosas fue importante debido a su influencia que tuvieron en las disposiciones tomadas para el gobierno en estas tierras por el rey, los Consejos de Indias y de Castilla que se fundamentaban en sus informes.

En defensa de los indígenas, con frecuencia tuvieron tremendos choques con los encomenderos que veían en sus prédicas un peligro para su hacienda y un obstáculo para sus ambiciones.

Luego de iniciada la conquista, se había avanzado poco en la catequización pues con Hernán Cortés solamente habían venido dos clérigos sin facultades para la conversión: fray Bartolomé de Olmedo y clérigo llamado Juan Díaz. Para cumplir con esa parte que era obligada, Cortés envió al rey una carta que recibió a principios de 1522 Carlos V, en que le anunciaba la toma de la ciudad de México y pedía a España frailes mendicantes cuya sencillez reflejara mejor el mensaje de Cristo, no el alto clero porque: “Habiendo obispos y otros prelados no dejarían de seguir la costumbre que, por nuestros pecados, hoy tienen en disponer los bienes de la Iglesia, que es gastarlos en pompas y en otros vicios, en dejar mayorazgos a sus hijos y parientes... y si ahora viesen (los nativos) las cosas de la Iglesia y servicio de Dios en poder de canónigos y otras dignidades, y supieran que eran ministros de Dios, y los viesen usar de los vicios y profanidades... sería menospreciar nuestra fe y tenerla por cosa de burla; y sería a tan gran daño, que no creo aprovecharía ninguna otra predicación que se les hiciere. “

Con ese propósito, a petición de Carlos V, el Papa Adriano VI, expidió en Zaragoza la bula Charisimo in Christo filio nostro Carolo quinto Romanum et Hispaniarum Catolicum Regi electo. Conocida como bula Obnimoda, que otorgaba al rey la facultad de enviar ministros a las Indias, y da a los elegidos "autoridad para todo ejercicio, en ambos fueros, de los actos episcopales que no requiriesen expresamente la investidura episcopal, con la extensión que ellos creyesen conveniente para la conversión y aprovechamiento de los indios".

En virtud de estas facultades, el emperador mandó a los frailes Juan du Toic o de Tecto, guardián del convento de San Francisco en la ciudad de Gante; a Juan de Ayora o de Ahora y un lego Pedro de Mura, conocido como Pedro de Gante. Fray Pedro de Gante había nacido en Ayghem-St-Pierre, Gante, Bélgica, en la década de los noventas del siglo XV; se sabe que Carlos V lo reconocía como pariente; su apellido original Moor, Van der Moere o de Muer, se latinizó Mura.

Gante, Tecto y Ayora, llegan a la Nueva España, en 1523. Ixtlixóchitl les da aposento en el palacio de Nezahualpilli en Texcoco, donde se ocupan en aprender los idiomas locales. Fundarán las primeras escuelas donde enseñarán a leer, escribir, cantar, tañer algunos instrumentos musicales y la doctrina cristiana a los hijos de muchos caciques y principales.

A principios de 1527, Gante se trasladará a México donde se dedicará a la educación. Fundará varias escuelas, entre ellas la de México, que dirigirá cincuenta años. El sistema de enseñanza será el siguiente: por las mañanas, lectura, escritura y canto, y por las tardes, doctrina; se asistirá a las fiestas religiosas y se cantará en coro; a los pequeños no les permitirá comunicarse con sus familiares, "para que no se contaminasen de los errores de la idolatría"; serán preparados también jóvenes para enviarlos como catequistas a los alrededores de México y a las provincias cercanas; se enseñará latín, pintura, escultura, artesanías y arte de bordar, y se establecerán talleres donde trabajarán diversos oficios tales como: canteros, herreros, carpinteros, albañiles, sastres y zapateros. Erigirá la iglesia de San José de los Naturales, y varias iglesias y capillas, entre ellas las de los barrios de Santa María, San Juan, San Pablo y San Sebastián. En 1529, Gante referirá haber hecho construir más de 100 iglesias y bautizado a más de 200 mil naturales. Gante se hará muy famoso por sus virtudes y dedicación, el arzobispo Montúfar, llegará a decir: "Yo no soy el arzobispo de México, sino fray Pedro de Gante".

Fray Pedro de Gante escribirá: Doctrina Cristiana en Lengua Mexicana, "Cartas al emperador" y otras obras del genero epistolar como la carta dirigida en común a los padres y hermanos de la provincia de Flandes de 27 de junio de 1529, en la que dice: "Mi oficio es predicar y enseñar día y noche. En el día enseño a leer, escribir y cantar; en la noche leo doctrina cristiana y predico. Por ser la tierra grandísima, poblada de infinita gente, y los frailes que predican pocos para enseñar a tanta multitud, recogimos en nuestras casas a los hijos de los señores y principales para instruirlos en la fe católica, y que después enseñen a sus padres. Aprendieron estos muchachos a leer, escribir, cantar, predicar y celebrar el oficio divino a uso de iglesia. De ellos tengo a mi cargo en esta ciudad de México al pie de quinientos o más, porque es cabeza de la tierra. He escogido unos cincuenta de los más avisados, y cada semana les enseño aparte lo que toca hacer o predicar la domínica siguiente, lo cual no me es corto trabajo, atento día y noche a este negocio, para componerles y concordarles sus sermones. Los domingos salen estos muchachos a predicar por la ciudad y toda su comarca, a cuatro, a ocho o diez, a veinte o treinta leguas, anunciando la fe católica, y preparando con su doctrina a la gente para recibir el bautismo. Nosotros con ellos vamos a la redonda destruyendo ídolos y templos por una parte, mientras ellos hacen lo mismo en otra, y levantamos iglesias al Dios verdadero. Así y en tal ocupación empleamos nuestro tiempo, pasando de toda manera de trabajos de día y de noche, para que este pueblo infiel venga al conocimiento de la fe de Jesucristo. Yo, por la misericordia de Dios y para honra y gloria suya, en esta provincia de México donde moro, que es otra Roma, con mi industria y el favor divino, he levantado más de cien casas consagradas al Señor, entre iglesias y capillas, algunas de las cuales son templos tan magníficos como propios para el culto divino, no menores de trescientas tercias y otras de doscientas. Cada vez que salgo a predicar tengo sobrado que hacer en destruir ídolos y alzar templos al Dios verdadero. Pues así estas cosas, os ruego, padres y hermanos muy amados, que os dignéis orar por mi al Señor, para que oyendo vuestras oraciones, me alumbre y conozca yo lo que debo hacer y lo haga, y persevere siempre en su servicio y voluntad hasta el fin. Deseo y pido encarecidamente que alguno de vosotros tome sobre sí, por amor de Dios, el trabajo de traducir esta carta en lengua flamenca o alemana, y la envíe a mis parientes para que a los menos sepan de mí algo cierto y favorable, como que vivo y estoy bueno. De lo cual sea a Dios gloria y alabanza. No tengo por ahora más que escribir, aunque mucho pudiera contar de esta tierra, si no fuera porque del todo he dejado mi lengua nativa…"

Un año después de la llegada de fray Pedro de Gante, en 1524 desembarcará en Veracruz, la misión franciscana de fray Martín de Valencia -entre ellos, fray Toribio de Benavente-, a cuya autoridad se incorporaron los que ya estaban: Gante, Tecto y Ahora. Ellos harán lo que los españoles no lograron con la espada. Robert Ricard (Conquista Espiritual de México) refiere entre los "años 1523 y 1572 es cuando se funda y organiza la Iglesia en México… Fue entonces cuando se llevó a cabo la 'conquista espiritual' de la Nueva España". Los frailes Tecto y Ahora, morirán durante la expedición de Cortés a las Hibueras. La muerte de Gante ocurrirá en la ciudad de México en 1572.

Doralicia Carmona. MEMORIA POLÍTICA DE MÉXICO.